jueves, 24 de diciembre de 2009

siete

Desde hace mucho, mucho tiempo; hablo desde mi primera juventud, imagínense que lejos queda ya, me rondaba la cabeza un pensamiento: si la sociedad tiene la capacidad material de dar de comer y proporcionar vivienda a todos sus miembros, sino falta comida ni ladrillos, ¿porque hay gente que pasa necesidades y no tiene donde vivir? Nunca pude responder a esta pregunta. Se la dejo a los economistas. Lo que si es cierto que en haciendo cómputo general del nivel de vida en los paises capitalistas más desarrollados siempre nos encotramos que en ellos hay un 20 ó un 30 % de población que tiene serias dificultades para obtener con lo minímo que cualquiera de nosotros le pide a la vida: pan y casa. Según el pais, existe otro tanto por ciento de la población que aunque tiene esos medios materiales que al primer grupo le falta, su "márgen de beneficios" es tan estrecho que siempre anda con el riesgo de descolgarse de el, y caer una vida con necesidades elementales. Esto que gracias a la protección de la familia o del estado rara vez ocurre, marca la existencia de tales ciudadanos porque a ellos el miedo les condicona la vida. Por último, están otro gran segmento de la población que si disfruta de las ventajas del capitalismo y la minoria que son el capitalismo, la nobleza privilegiada del sistema que lo capitanea a su albredio y beneficio. En los últimos veinte años, es curioso constatar que el gran desarrollo de los sistemas capitalistas ha beneficiado especialmente a esta minoria, las estadisticas de reparto de la riqueza reflejan que cada vez menos tienen mucho que mas que la mayoria. Sobre todo que aquella parte de la sociedad que vive de las rentas del trabajo. El capitalismo por muy desarrollado que esté, condena a una parte de la sociedad a no beneficiarse nunca de que la riqueza que genera, y otra parte muy importante a beneficiarse pero de manera muy precaria.
No respondí a porque esto ocurre, ni responderé, lo que sí haré será explicar que forma ideé para que ese 20 ó 30 % puediera vivir dignamente sin ser excluido de la sociedad. De manera muy somera mi respuesta sería esta: partiendo del hecho de que por muy desarrollado que sea el capitalismo no puede llevar a toda la población sus beneficios, y de que todos los intentos que procura el estado para corregir esto al final son inutiles como demuestra la experiencia, habrá que diseñar un modelo económico que al menos no deje le fuera de la sociedad. Quizas no con mas capitalismo, sino con mas comunidad.

martes, 22 de diciembre de 2009

seis

Imaginemos un sistema económico en el que el instrumento de pago sea el de las tarjetas de crédito, dejándo a un lado el método tradicional de la moneda. Todo el caudal de dinero negro desaparecería, terminaría aflorando y permitiría la activación de un periodo económico expansivo. Una medida simple de gran impacto en la sociedad. Aparte de la influencia positiva que tendría en la erradicación de los focos donde se genera el dinero negro, generalmente relacionados con la delicuencia, tandría otras consecuencias positivas por ejemplo, aumentaría de manera significativa la recuadación fiscal del estado, por dos vías: al ser declarado el dinero opáco, por el tiempo que no lo fue el estado se apropiaría de un porcentaje como pago por su "blanqueo"; y asi mismo, el aumento del PIB, terminaría aumentando los ingresos anuales del estado.
Sigamos imaginando: ¿ Que podría hacer el estado con estos excedentes recaudados? Un liberal propondia la disminución de los impuestos, proporcional al aumento de los mismo logrados con el experimento monetario. Esto, sigue su pensamiento, provocaría a su vez, una mayor actividad económica, aumento de los beneficios empresariales, mayor inversión, mayor recaudación fiscal, entrando asi en una espiral que terminaría con todos en el cielo al lado de dios. (Algo que por otra parte nunca se ha producido, pese a las bajadas de impuestos y la reducción general del estado que imponen cuando llegan al poder)
Un izquierdista, los utilizaría para favorecer mediante la inversión en bienes comunitarios, la igualdad material de los ciudadanos. Politica de cheque a los menos activos de la sociedad ( que dirán los elementos de la derecha) que generará vagancia, falta de iniciativa, y por ultimo una espiral negativa hacia el infierno económico.
¿ Existe otra manera de utilizar tales excendentes? Pues si, mi idea. La que explicaré en la proxima entrada...

lunes, 21 de diciembre de 2009

cinco

Si algún dirigente nos propusiese al menos dos dias a la semana no encender la luz, utilizar solo velas, no coger el coche, no gastar en cosas superfluas, solo en básico como en comida. Los fines de semana suspender la circulación aérea. Esos dias los transportes publicos odrían ser gratuitos. Estariamos hablando de reducir el impacto del hombre en la natulareza en un 15%. E igual cuando se de cuenta de que puede vivir sin gastar tanta luz, sin consumir tanto seguirá con esas costumbre el resto de los dias de la semana , con lo que el impacto beneficioso será mayor. ¿ Usted lo aceptaría?

No se preocupe, ningún dirigente que tenga en su programe electoral tales medidas será elegido por usted. Aunque por azares del destino lo fuese, no los pondria en practica porque tales medidas reducirian el consumo, motor de la economia capitalista. Y provocarian una crisis del sistema capitalista. Hay una contradicción básica entre lo que beneficia el crecimiento de la economía capitalista y la misma existencia de la sociedad moderna actual y el ecosistema donde esté inserta. Si el capitalismo se desarrolla como lo ha venido haciendo en este último siglo, terminará agotando los recursos, y produciendo tal impacto en el medio ambiente que llegará un momento en que él mismo se autodestruirá y con el nuestra forma de vida, provocando un inmeso sufrimiento. Esto quiere decir que para el sistema capitalista sobreviva, el planeta debe de ser destruido por él. Habrá algo que tendremos que cambiar.

cuatro

¿ Cómo se pudo conceder unas olimpidas, símbolo de unos ideales de paz, tolerancia y respeto, a un pais como China, máximo representante de todo lo contrario?
Hemos fracasado como proyecto común, sin tan siquiera haberlo intentado.

tres

¿Los dirigentes chinos a quien representan? ¿ Cómo pueden decidir por mi? No han sido elegidos por su pueblo, están ahí por los mismo azares que lleva al matón de barrio a ser el jefe de su cuadrilla, o al ganster a convertirse en el capo de su clan. ¿ Cómo puede unos dictadores que no respetan ni a su propio pueblo, decidir el futuro del planeta? Sólo me cabe una respuesta: porque ellos mueven el comercio mundial.
Y que decir de Obama? la gran esperanza. Otro producto de mercadontecnia, vacio, sin ideales. Y ste si lo eligió el pueblo, como a Bush.
Y de Lula? el progresista, obrero, esperanza de la clases humildes.
Todos hemos incado la rodilla ante el desarrollismo desmedido, despredador, que no parará hasta conducirnos al desastre. Ante las grandes corporaciones. Ante el deseo consumista irrefrenable que nos han inoculado, para que tengamos algun papel que jugar dentro de este sistema sin cabeza, solo regido por los intereses inmediatos, por el afán de lucro, y el ansia de poder.

DOS

Termina el años con la terrible noticia del fracaso de la Cumbre de Copenhague. Cuando pase veinte años y las consecuencias de su no-decisión las suframos la mayor parte de la población mundial, los dirigentes, los privilegiados del sistema, pedirán perdón, como lo hacen con la crisis económica actual, pero desde su situación privilegiada los efectos devastadores del cambio climático no les afectará tanto como a las capas mas bajas de la sociedad. Recordad estos nombres: Obama, Wen jiabao, Lula da Silva, Manmohan Sing. EE.UU, China, Brasil y la India han decidido el destino de la humanidad, protegiendo los intereses económicos de las grandes corporaciones en contra de los intereses generales a largo plazo de sus ciudadanos y del planeta en su conjunto. Este es un sistema que carece de instrumentos para reconvertir sus carencias, sin control alguno. Un sistema incapaz de aflojar el paso aunque ese paso le lleva al abismo. Ya no se trata de ser reformado sino de ser directamente sustituido por otro. Necesitamos un lider que enseñe el camino al conjunto de los ciudadanos que están tomando conciencia del desastre que se avecina. Un sistema basado en el egoismo individual hará que al final triunfen los egoistas. Un sistema que fomente el bien común sacará lo mejor que el hombre lleva dentro.